Está claro que tras el término de la serie madre "The Walking Dead", muchas eran las series que se iban a extender a raíz de esta como ya habíamos comentado con anterioridad.
"The Walking Dead: Daryl Dixon", probablemente fuese, sino la más esperada, de las más esperadas bajo este respecto.
En ella se cuenta la llegada de Daryl (quien recordemos nunca estuvo en las novelas gráficas) a Francia, país que en la segunda temporada de "The Walking Dead: World Beyond" nos vaticinaba que era el país de donde surgió el virus que cambió el rumbo de la humanidad.
De hecho, vemos en el primer episodio a Dixon llegando varado en el mar como si de un náufrago se tratase, chocándonos bastante el como ha podido llegar hasta Francia, puesto que entre los dos países les separa nada más y nada menos que unos siete mil seiscientos kilómetros de distancia aproximadamente.
Una vez en Francia, Dixon se topará con diversos personajes, entre los que destaca Sylvie y su sobrino Laurent, quienes viven en un convento custodiados por unas monjas que velarán por sus seguridad:
Como era de esperar en estos casos, el niño posee un don especial, puesto que nació de su madre estando ella infectada, haciendo que el ya adolescente tenga en sus venas lo que podría ser la cura a la tragedia mundial a la que se ve relegada el universo de The Walking Dead.
Curioso es el planteamiento de esta serie, ya que localizar la acción fuera de Estados Unidos es interesante, al igual que el ver hablando a los personajes que deambulan en estos episodios en francés es otra perspectiva que la hace especial, así como lo es a su vez la interacción de un personaje tan estadounidense como el de Daryl conviviendo en una Francia post apocalíptica, siendo este uno de los países más europeos de Europa.
Ese cambio de realidad dentro de la misma realidad le hacen tener a la serie un toque especial y diferenciador del que carecía la serie de Negan y Maggie.
Porque ya no sólo la propuesta argumental es interesante, sino de fondo, los personajes me parecen más trabajados y la declaración de intenciones más acertada que la otra serie, puesto que poner en el episodio uno a monjas pegando tiros es absolutamente memorable.
Como lo es también ver el origen de la pandemia en otros países a modo de flashbacks o contar con actores de la talla de Dominique Pinon para hacer un personaje como el de Antoine que aunque sólo contemos con él en un par de episodios le da ese toque de humanidad necesario en este tipo de series, sobretodo de spin offs.
Sinceramente, esta "The Walking Dead: Daryl Dixon" ha sido una grata sorpresa, de hecho se me ha hecho hasta corta.
Esperando que nos contarán en sucesivas temporadas, teniendo en cuenta que (SPOILER) al final de esta temporada tenemos la intervención de Carol, la mejor amiga de Daryl y que muy probablemente de caña en la segunda temporada, aunque me da la sensación que antes la veremos en la serie que cuenta los años posteriores al fin de The Walking Dead.
Otro apunte para terminar y antes de que se me olvide, os resuelvo la duda de cómo Daryl llegó a Francia. Se cuenta disgregadamente a lo largo de la temporada al igual que los orígenes de la pandemia en el país galo.
Seguiré sumergido en este universo y hablando sobre ello.
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