lunes, 28 de noviembre de 2011

NUEVA ETAPA

¡Arriba esos trastos!
Me he vuelto a mudar, y cuando digo a mudar no quiere decir cambiar de calzoncillo, sino de piso.

Tampoco he ido muy lejos, me he mudado al piso de arriba, algo que alegró enormemente a Angelines que no paró de darme besos y abrazos cuando se enteró de la noticia.

En cuanto a las cosas que he tenido que hacer destacan:

- Sacar cosas de armarios.
- Seleccionar ropa (algo que me ha venido francamente bien)
- Pensar con que me quedaba y con que no.
- Limpiar a fondo la casa nueva, etc.

Y todo ello con la inestimable ayuda de mi madre.

Pero lo que peor he llevado de todo esto es el montar dos muebles de IKEA.

No digo que no estén estupendamente y que la calidad precio sea la más óptima, pero esas manualidades a gran escala no son para mi.

Me pasé casi dos horas para montar una estantería y una mesa.

Cuando montaba mi nuevo mobiliario, me vino a la cabeza en más de una ocasión mi amiga bloggera Pecosa a la cual leo habitualmente y alucino con su destreza a la hora de reparar muebles. Yo, sin embargo, no tengo paciencia para eso como para muchas otras cosas.

Así que bueno, una nueva etapa empieza. ¡A por ella!

IKEA = Bricomanía a lo bestia.

martes, 8 de noviembre de 2011

EL PLACER DE FUMAR

Plantación de tabaco.
Nunca he fumado. De hecho, no me atrae lo más mínimo. En su momento, vi con buenos ojos la puesta en marcha de la ley antitabaco, pero tengo que reconocer, que fue un inconveniente para muchos hosteleros que habían realizado grandes inversiones para modificar sus negocios habilitando zonas para fumadores y otras para no fumadores.

Aunque no lo comparta, también entiendo que existan determinadas personas a las que les guste fumar.
Seguramente, muchos de ellos comenzaron en la adolescencia queriéndose hacer los héroes del grupo, o quizás, fumaron por vez primera para no sentirse rechazados dentro de un colectivo.

Con el paso de los años he conocido a verdaderos apasionados del tabaco. El último de estos apasionados con el que me topé  fue un conocido de mi madre.

El hombre en cuestión (del cual no recuerdo el nombre) se encontraba tomando un vino con su esposa, en una vinatería colindante a la vivienda de mi progenitora.
La estanquera de toda la vida
Al vernos, rápidamente nos invitó a que nos sentásemos a compartir mesa con ellos.

Una vez sentados sacaron el tema de que los cigarrillos ya no contenían acelerantes para su rápido consumo, y que ahora había que estar atento para que no se apagasen.
Después hubo otra conversación sobre tabaco negro que mi limité a escuchar. Un tema enlazó con otro y se habló de  marcas, formas de fumar, como, cuando y donde hacerlo o los Habanos y su conservación.

Finalmente, (antes de mi retirada para dormir, puesto que después de un largo viaje mi cuerpo me pedía descanso) salió el tema de fumar en pipa. Entonces al hombre se le iluminaron los ojos.

- A mi me encanta fumar en pipa, en verano me siento bajo la sombra de un árbol y eso me sabe mejor que una teta novicia.

Ciertamente me hizo gracia el comentario y aunque no me gusta el tabaco y esté contento por la incorporación de la ley antitabaco, pienso que lo importante es dejar que la gente sea feliz.
Así que amigo, fume usted en pipa cual "Gandalf el Gris". Ha sido un placer conocerle.
Gandalf fumaba en pipa antes que Sherlock Holmes.

martes, 1 de noviembre de 2011

PAN PAYÉS

En los últimos tiempos estoy grabando un evento que me lleva por toda España. Como tenemos que ir y venir en el mismo día, en ciertas ocasiones nos toca desayunar y comer en mitad de camino.

Lo que llevo peor es el desayuno, puesto que si no encuentras un sitio que sea bueno, puede dañar tú estómago para el resto del día.

¡A desayunar!
Mi amigo Julián y yo paramos en un área de servicio. El sitio era de lo más moderno a la par de cañí. Existía una extraña combinación de Cd's de Isabel Pantoja, de botas de vino y una especie de bates de baseball de equipos de fútbol.

Pedimos el desayuno.

- Hola buenos días, queríamos desayunar.- Le dije a la chica cortésmente.
Isabel, a la sombra de las botas de vino.


- Sí, dígame, ¿Qué quieren?

- Dos tostadas, un café con leche y un té con leche.

- ¿De Pan Payés?

- ¿Cómo? .- Le respondí.

- Las tostadas, que si las quiere de Pan Payés.

- Ah, sí, sí. .- Dije sin darle importancia.

Fui al baño.

Al volver miré la mesa, sobre esta, se encontraba nuestro desayuno.

El mío, en concreto, era  el café con leche y el Pan Payés.

Desayuné. Fui a pagar.

El genuino "Pan Payés"
- ¿Cuánto es?

- 7 Euros.

Cada desayuno había salido a 3,50 € y me había quedado con hambre. Eran las siete y media de la mañana y nos habían timado.

Llegamos a Logroño con margen. Paramos a tomar otro café.

Un cartel llamó mi atención:

"Desayuno: Café o infusión, tostada y zumo 1,80 €"



El Critter desayuna dos veces.


Como os podéis imaginar, volví a desayunar.