Dicho intercambio consistía en que enviabas un libro y recibías 20 o más a cambio.
Por el momento creo haber recibido unos nueve, con lo cual la cosa no va mal.
El primero que me llegó fue este "El monje que vendió su Ferrari" de Robin Sharma.
Tengo que reconocer, que al igual que dice en uno de los pasajes de este libro, siempre subestimé a aquellas personas que leían libros de este estilo o de autoayuda.
Sin embargo, al sumergirme en las páginas de este libro he podido (al menos) cultivar mi amor propio y quizás no ser tan dadivoso con quien incluso ni conozco.
Este libro cuenta la historia de Julian Mantle, un empresario que tras un ataque al corazón decide vender todas sus posesiones y acudir a la India en busca de respuestas.
Una vez allí aprenderá diversas lecciones que ayudarán a encauzar mejor su vida. El coraje, la disciplina, la fe...
Todo esto narrado a modo de historia a uno de sus mejores amigos de su época de abogado, al cual intenta instruir en estas nuevas doctrinas.
¿Cuánto tiempo dedicamos al trabajo y no a nosotros mismos? ¿Cuántas cosas no hacemos por miedo? ¿Por qué vivimos pensando en el futuro y nunca en el presente?
Sin lugar a dudas, en sus páginas he logrado intentar buscar respuestas tras un bache inesperado y emocional que estoy atravesando (una vez más) y del que espero salir airoso (como de costumbre).
Creo que me voy a aficionar a este tipo de lecturas. Después de todo, no hay nada como aprender de los demás.
Siempre he escuchado a quienes me rodeaban, sus consejos, algunos los he aceptado y otros no, pero de lo que no cabe duda que la fuerza de uno mismo está en su propio interior y tiene que ser así.
No sé quien ha sido la persona que me ha enviado el libro, ha decidido hacerlo desde el anonimato, pero tengo que agradecerle que me presentarse a Robin Sharma, del que sin duda seguiré leyendo más cosas.
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