AS BESTAS

La historia de la humanidad está  ligada a conflictos sobretodo en entornos rurales, donde dichas rencillas pasan de generación en generación. 
Algo que el cine ha plasmado en contadas ocasiones a lo largo de la historia.

Basada en un hecho real, "As bestas" (Ídem - Rodrigo Sorogoyen (2022)) nos cuenta una historia de perdedores, unos perdedores que están condenados a la tierra donde nacieron y donde la oportunidad de prosperar debido a la instalación del unos molinos de viento se ve frustrada por la irrupción de un francés que se ha mudado a dicha aldea con una idea ecologista. 

Esta idea pasa por la repoblación de una zona aislada, que no es otra, que el pueblo dónde se ha propuesto instalar los molinos eólicos. 
Xan y Lorenzo son los vecinos del francés Antoine y su mujer Olga quienes tienen que luchar contra el asalto diario de los dos hermanos quienes coaccionan al matrimonio con tal de que abandonen el poblado y dejen al resto de vecinos que entren las eólicas. 

La vida del matrimonio se convertirá en más que menos un infierno, que terminará con la mayor de las venganzas y con la desaparición de Antoine.
Dura película que navega entre el drama social y por momentos el thriller, que nos habla de un hecho real de aquellos que ven la vida de una manera y aquellos que la ven de otra. 
De quienes huyen de la vida en la ciudad y los que desean ir a ella. 

Del ser humano, de lo primitivo y de aquellos que necesitan de acontecimientos externos para poder avanzar, en definitiva habla de la vida, que queramos o no es cruel. 
Como de costumbre en el cine de Sorogoyen, un filme hermoso, perfectamente construido y que engrana a la perfección los cuatro personajes, los dos hermanos interpretados por Luis Zahera y Diego Anido y la pareja francesa interpretada por Maria Foïs y el siempre formidable Denis Ménochet. 

No os la perdáis.