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| La Película que ha inspirado mi entrada |
Viajaba de pie leyendo un libro. Para mi no suele ser complicado concentrarse aunque exista ruido a mi alrededor, aunque con la llegada de éstos jóvenes que no paran de cantar y berrear constantemente, se me ha hecho complicado en más de una ocasión enterarme de lo que leo, con lo cual tengo que parar de leer.
Fue entonces cuando tomé la determinación de observar lo que sucedía en el vagón donde me encontraba.
Como digo, a mi lado había multitud de jóvenes cristianos, apostólicos y romanos que no paraban de canturrear. Pero dichos individuos se mezclaban con la flor y nata de nuestra ciudad, el "Spanish Man" o también conocido como "Macho Español" o en su defecto "Hispánico".
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| Gato = Madrileño de pura cepa |
Pues bueno, el metro era una especie de "Torre de Babel" de lo más bizarra. Fue entonces cuando dirigí mi mirada a un lateral, allí un hispánico ser miraba con lascivia a una joven cristiana.
La chica de una tez blanca inigualable, portaba una bandera estadounidense y un short hacía que su blancura de Wichita pusiese por las nubes al susodicho pasajero.
El hombre le aguantó la mirada a la muchacha durante varias paradas. Luego, yo me bajé, la chica también lo hizo en la misma estación que yo.
Me dio pena de aquel hombre (que la siguió mirando con pena por su repentina ausencia), en el fondo, quizás, ese había sido el mejor momento del día para él."C'est la Vie".
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| La chica de Wichita con sus amigas |
Todas ellas fueron a disfrutar de la noche de las camisetas mojadas que celebraron en Cuatro Vientos. A ellos se les marcaba el paquete terso debido al calentón. Toda una aventura rodeados de octogenarios disfrazados de Carmen de Mairena.
ResponderEliminarFue un acto de amor de uno hacia otro, estoy convencido.
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