Ha llegado la tercera temporada inspirada en el Spin off de uno de los personajes más queridos dentro del universo de The Walking dead, Daryl Dixon.
Y es que tras su llegada a Europa, este personaje ha ido deambulando de un lugar a otro buscando la mejor manera de volver a los Estados Unidos junto con Carol quien también ha atravesado el charco en busca de su mejor amigo.
Entre tanto y tanto viaje la pareja de héroes llega a España, en la que al igual que el resto de territorios del planeta está asolada por los no vivos.
Una España repleta de tradiciones y de costumbres que pasan incluso por el reinado de una clase privilegiada que una vez al año se lleva a una joven lejos del pueblo en donde residen los nuevos amigos de los protagonistas de esta serie.
Ahora bien, como era de esperar en estos casos y al igual que ha sucedido a lo largo de las temporadas de la serie original y de esta, parece ser que la llegada de Daryl y Carol rompe la armonía a la que estaban acostumbrados para bien o para mal los habitantes del lugar.
Lo más bonito de esta temporada es el poder ver a un sinfín de actores españoles que pasan frente a nosotros y la verdad que eso enorgullece. Nunca que pensé que este mundo se extendiese a nuestras fronteras, así que es estupendo.
Por otro lado, como era de esperar en esta tercera temporada hay momentos para las muertes épicas, para fugaces historias de amor y para villanos que aguantan un episodio pero que se terminan convirtiendo en carismáticos.
Al parecer, la cuarta temporada será la última de este Spin off. Quién sabe si finalmente Daryl y Carol se reunirán con los amigos que dejaron en América y que con ellos comience así una nueva serie.
Me da la sensación que por ahí irán los tiros.
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