EL JUICIO DE LOS 7 DE CHICAGO

Parece que últimamente sólo hago publicaciones de películas en las que aparece Sacha Baron Cohen, pero, nada más alejado de la realidad. 
Por suerte, para nosotros como espectadores, estamos disfrutando de un actor que es una especie de Peter Sellers moderno, camaleónico y capaz de hacer lo que le venga en gana. 

De hecho en esta "El juicio de los 7 de Chicago" ("The trial of the Chicago 7" - Aaron Sorkin (2020)) interpreta a un hippie que acude a las manifestaciones contra la guerra de Vietnam en el año 1969 y que junto a otras seis personas de distintas partes del país, son juzgados por altercado público y por incitar a la violencia en dichas manifestaciones. 

Su realizador, Aaron Sorkin, afamado guionista reconvertido a director, plasma en cierta medida como lo que en un principio iba a ser un acto pacífico, se termina convirtiendo en una absurda disputa, donde las fuerzas del orden ejecutan una fuerza policial desmedida contra los asistentes a la convocatoria.

Y es que en aquellos tiempos, muchos eran los movimientos que estaban en contra de la Guerra de Vietnam. 
Uno de los más destacados eran los Panteras Negras, tachados por algunos de grupo terrorista y que defendían entre otras cosas, la no participación de ciudadanos afroamericanos en la contienda que se gestaba a miles de kilómetros de distancia. 

Aunque claramente vista desde el lado demócrata "El juicio de los 7 de Chicago" es un buen ejemplo de una representación de la población estadounidense tanto en aquellos tiempos como a día de hoy. 

Ahora bien, ¿es este filme una película propagandística? Puede ser, pero como producto a mí me funciona, y me ha ayudado a entender un poco más el pensamiento y el comportamiento de la sociedad estadounidense de la época. 

En cuanto otros aspectos de la película, además de Cohen (que deseo que se lleve el Oscar por este filme) cabe destacar la presencia e interpretación de Mark Rylance como abogado de los 7 de Chicago, y que para mi, debería de haber estado nominado a la dorada estatuilla por su trabajo en este filme.
Por otro lado, no puedo olvidarme de uno de los mejores actores secundarios de Hollywood, David Carroll Lynch (algún día tendrá un Oscar, acordaros de esto) y uno de mis favoritos de la actualidad Eddie Redmayne, del que todo lo que diga es poco. 

Si pensamos en los Oscar creo que se va a llevar dos claros, Mejor Actor de reparto - Sacha Baron Cohen y Mejor guion Original para Aaron Sorkin. 
Espero que así sea. 

Por cierto, superproducción de Netflix.