JOSEFINA

Javier Marco Rico desde su etapa como realizador de cortometrajes nos tiene acostumbrados a un cine muy peculiar, un cine, donde lo cotidiano muchas veces tiene que ver con en ocasiones un punto de realismo mágico, que bien nos podría acercar al universo de Gabriel García Márquez. 

Y es que la dupla que hace con su guionista habitual Belén Sánchez-Arévalo hace del cine de ambos inconfundible. 

"Josefina" (Ídem - Javier Marco Rico (2021)) nos cuenta la historia de Juan quien desde el fallecimiento de sus ancianos padres vive sólo en lo que fue la vivienda familiar.
Allí, lleva una vida monótona que pasa de casa al trabajo y del trabajo a casa. 
Un trabajo, igual que monótono que su vida; es funcionario de prisiones, además de ser uno de los encargados del control de cámaras de seguridad de una cárcel. 

Es en uno de esos viajes al trabajo es cuando Juan se encontrará con Berta, la madre de uno de los reclusos de la que se enamora perdidamente. 
Por azares del destino, en uno de los trayectos del autobús se consuma un encuentro inesperado entre Juan y Berta iniciándose así una inesperada historia de amor.
De hecho, Juan no es sincero de primeras con Berta a la que no le dice la verdad sobre su puesto de trabajo, sino que la engaña diciendo que tiene una hija llamada Josefina en el bloque de mujeres. 
Pasados unos días, Berta le comentará a Juan que los jóvenes se podrían intercambiar correspondencia y así darse apoyo mutuo. 

Entonces Juan comenzará a escribir cartas como si fuese Josefina , para que Sergio el hijo de Berta pueda recibirlas. 
Lo que Juan no esperaba es que Josefina existiese más allá de su imaginación. 

Inteligente y bien planteada, sólida en guion e interpretaciones "Josefina" es un notable debut de Javier Marco Rico quien ha recibido su segunda nominación al Goya tras haber conseguido la estatuilla en la pasada edición al Mejor Cortometraje de Ficción. 

Todo en la película funciona, su reparto, la puesta en escena y un final digno de enmarcar. 
Si podéis, no os la perdáis.