miércoles, 25 de marzo de 2020

EL HOYO

Ni que decir tiene que desde los años 90 del pasado Siglo XX, el cine de género fantástico español ha crecido en público a lo ancho y largo del globo.
Tanto es así, que se ha convertido en un un emblema, como lo puede ser el cine de terror coreano o el estadounidense, donde cada año nos dejan más de una y más de dos propuestas interesantes.

El pasado 2019 irrumpió con fuerza "El Hoyo" (Ídem - Galder Gaztelu-Urrutia (2019)), que entre otros hitos logró cuatro premios en el Festival de Sitges, entre ellos Mejor Película y se hizo además con tres nominaciones a los premios Goya, donde se alzó con el premio a los Efectos Especiales.

Y es lo bueno que tiene "El Hoyo" y por lo que no pasa desapercibida es la buena propuesta y originalidad de su guion.
Una cárcel constituida en distintas plantas donde la forma de alimentarse es la base de la subsistencia.
En cuanto más arriba estés, más probabilidades de tienes de comer y con ello, de vivir.

De hecho, la plataforma que baja desde el lo alto de las instalaciones de "El Hoyo" es majestuosa, sobre la improvisada mesa de dicha plataforma se pueden disfrutar de los más suculentos manjares; carnes, pescados, frutas e incluso una gran variedad de tartas.
Pero a medida que la plataforma desciende, los de abajo van teniendo menos alimento que llevarse a la boca, lo que puede llevar (y sucede) a que hagan todo lo posible por subsistir.
Con ello, no dudarán en recurrir al canibalismo si hace falta o a la violencia más extrema, y es que a fin de cuentas, lo único que importa es poder cumplir tu condena y volver a ser libre.

No sólo me gusta la propuesta visual de film, (que es increíble) sino que me parece fascinante como está dialogada. Tanto es así que es interesante lo que hablan los personajes, las conversaciones que tienen y como los valores humanos van variando de uno a otro.
Los hay que su ética  no les permite alimentarse de carne humana y los hay que no dudarán a matar a su compañero de celda si hiciese falta para poder sobrevivir.
Ahora bien, las situaciones extremas son las que hacen que nos veamos tal cual somos, y en muchas ocasiones no nos gustaría ver lo que estamos dispuestos a hacer.

El filme cuenta con muchísimos apuntes de guion, podría citar unos cuantos, así que comparto con vosotros uno de ellos, la muy interesante propuesta de que cada una de las personas que terminan en "El Hoyo" pueda llevar un objeto.
El protagonista de esta historia decide llevar un ejemplar de "El Quijote" para matar el tiempo, mientras que su primer compañero de celda decide llevar consigo un cuchillo irrompible, llamado "El Samurai 2000", un objeto, que por supuesto dará mucho juego en esta peculiar prisión.
Importante, es a su vez, la propuesta del filme en cuanto no cortarse en momentos gore o de violencia extrema.
Vemos como los protagonistas parten trozos de carne humana y se la comen, como hay peleas extremadamente violentas y como los habitantes de "El Hoyo" se quedan sin fuerzas por no poder poder comer, así que chapó por eso.

Y es que amigos, recordad que existen tres tipos de personas:

"Los de arriba, los de abajo y los que caen".

La impresionante puesta en escena del filme.

No hay comentarios:

Publicar un comentario