PESADILLA FINAL - LA MUERTE DE FREDDY

Lo sé, para un amante del cine de terror como yo, y que se ha visto cientos de películas de este género, el no haber visto la sexta entrega de las desventuras de Freddy Krueger es pecado, más aún cuando he visto la continuación y el posterior remake.

Se me quedó atascada y eso que las otras entregas las he visto en varias ocasiones, pero... cosas que pasan.
Ahora, en estos días de aislamiento, estoy viendo bastantes películas y series (me imagino que como muchos de vosotros) así que he aprovechado la ocasión para verla.
Una vez vista, puedo deciros que sin ningún género de dudas, que se trata de la peor película de la saga, aunque tengo que reconocer que tiene algún par de momentos interesantes, pero poco más.

Como le suele suceder a es este estilo de películas la premisa es interesante.
Freddy se aprovecha de un chico con amnesia para atraer a su hija y así vengar su desaparición. Un argumento un tanto cogido por los pelos, pero vale, me lo puedo tragar.
Lo que ya no apruebo es la parodia del personaje de Krueger, que si bien a lo largo de la saga iba creciendo en este aspecto (más aún cuando se convirtió en un icono pop de los años 80 del pasado siglo XX), en esta sexta parte es hasta ridículo.
Vemos a un Krueger subido en una escoba y volando, con un plano que nos recuerda a la bruja de "El mago de Oz" ("The Wizard of Oz" - Victor Fleming (1939)) o la caricatura de un Freddy jugando a los videojuegos en casi los albores del "Donkey Kong" o "Super Mario Bros."

Tampoco le favorece a la película la cantidad de imágenes en 3D que sirvieron un llamamiento al público de la época pero que poco pudieron hacer por salvar una historia que es cuanto menos, demencial.
Además, a raíz de este hecho se crearon leyendas urbanas en las que un chico en USA había muerto a navajazos mientras veía el filme... Y eso que no había redes sociales.

El filme, recurre también a los orígenes de Krueger, su infancia, la vida con su padre adoptivo (interpretado por Alice Cooper) o anuncios televisivos al más estilo Verhoeven para el que recurren a un Johnny Depp, que venía de hacer películas con Tim Burton o la oscarizada "Platoon" (Ídem - Oliver Stone (1986)) y que casualmente fue la primera de las víctimas de sanguinario asesino de los sueños.

Si querían que esta película fuese el cierre de una saga, ciertamente, es bastante decepcionante y me quedo con poquitas cosas como el breve papel de Yaphet Kotto uno de los tripulantes de la Nostromo de "Alien" (Ídem - Ridley Scott (1979)), o la recreación del imaginario Krueger de las calderas. Aunque el colorismo que hay en la película, influenciado por el universo MTV de los videoclips (que pegó muy fuerte en aquellos tiempos) poco le favorencen al filme.

Para completar la saga tenéis que ver esta "Pesadilla Final - La muerte de Freddy" ("Freddy's Dead: The Final Nightmare" - Rachel Talalay (1991)), pero tampoco os esperéis un peliculón, aunque bueno, supongo que ya contábais con ello.